martes, 28 de octubre de 2014

Catenaccio 9 - 2 MoMos: Pero con dignidad...

Se acababa un verano heladero para los momos y llegaba el otoño con su copa, esa especie de liguilla a una vuelta en la que puedes jugar contra el Madrid y el Barsa del distrito. Y como no podía ser de otra forma, sí: primer partido contra el Catenaccio de Agudo. Si fuéramos un equipo de segunda b podríamos asegurar que nos había tocado el gordo, ya que solo con la expectación y la taquilla, podríamos pagarnos todos los gastos de la próxima temporada. Pero como no lo somos, pues no nos salió del todo rentable la jugada (4 espectadores aprox y todos ellos entraron gratis). Totalmente incomprensible porque ver quemar calorías y sudar pura mayonesa a los Momos contra el Catenaccio no tiene precio…Pero en fin, la gente sabrá lo que hace…

Siete valientes Momos acudieron a la batalla: Santi, Fran, Vihlo, Juli, Manu, Adolfo y Poli, que debutaba con los gloriosos naranjas. Tras el saludo de Champions, ya se temía lo peor, sin embargo, los Momos se situaron bien en el campo (y Juli bien en el banquillo) y aguantaron con seriedad y sin apuros (solo los que Santi, portero esa noche, tenía por sacar) las distintas embestidas del Catenaccio, que tampoco conllevaron excesivo peligro para la meta mayonesera. Sin embargo, esta buena disposición no podía durar para siempre, y en una contra maldita nos hicieron pupa: 1-0. Con caras de “eeeaaa, ya empezamos…una vez que entra el primero, nos van a meter 15”, nuestro amado equipo salsero mantuvo bien el tipo, e incluso gozó de algunas oportunidades poco claras. Sin embargo, la naturaleza asesina del Catenaccio, antiguo campeón del distrito a nivel Sevilla, se hizo sentir y nos colaron un segundo gol. Pero ahí estábamos los Momos, jugando como sabemos (y aún así aguantando), trenzando verdaderas jugadas de calidad que se iban siempre fuera. Siempre, hasta que hicimos nuestra jugada estrella: córner que saca Fran con la derecha, balón que rebota en medio Catenaccio hasta que finalmente el portero (con indumentaria moma) la terminó de meter en su portería. 2-1 y aún teníamos fuerza para plantar batalla. Y así nos fuimos al descanso.

A la vuelta, y tras cambiar de balón, el Canetaccio hacía un tercer gol algo potrero pero no desmerecido, a lo que los Momos contestamos convirtiendo otro por medio de Adolfo. Sentíamos la emoción de que podíamos dar la sorpresa, esa emoción de hacer historia, de saber que la gloria te espera…hasta que nos metieron el cuarto, y un poco de tiempo después, el quinto, el sexto, el séptimo, el octavo y el noveno, que no paró Vihlo porque no quiso. Sí, momers del universo, a los Momos se nos acabó la mayonesa y solo pudimos perder con algo de honor. Sin embargo, para siempre quedará ese comentario que se escuchó en el banquillo del Catenaccio cuando salíamos tras el partido: “¿Pero esta gente juegan en tercera? Pues son buenos…”. Eaaa, ahí quedó eso. ¡¡TEMBLAD, MALDITOS!!


P.D. No se ha querido hacer sangre con la labor del árbitro, verdadero culpable del 9-2 con decisiones clamorosas y trascendentales como algunas jugadas que eran saque de banda nuestro y se los concedió a ellos. Por lo menos por lo menos 3. Quién sabe cómo hubiésemos quedado si las llega a pitar bien…

4 comentarios:

  1. Esto es genial! nunca lo hubiera descrito mejor

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  2. Montaito de Pringá29 de octubre de 2014, 0:31

    Muy buena crónica, sin duda, excepto porque fue a la escuadra dando en el palo, so mamón

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  3. Genial la crónica. Qué pena no haber podido jugar!! Por cierto se echan de menos los videos de momadas, tenemos q volver a grabar!

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